COMENTARIO
Finalmente hemos llegado al capitulo 50 de Génesis, las lecturas hechas nos van a permitir poder entender mejor el libro de Éxodo, pues bajo el contexto del Génesis es que se irán desarrollando los eventos mencionados en este libro, y podremos entender mejor cómo Dios va llevando en curso la formación del pueblo de Israel, su liberación y su regreso a la tierra prometida, tal como lo indica José antes de morir, haciendo jurar a los hijos de Israel, que lleven sus huesos, cuando Dios los haga volver a Canaán (Gn 50:24-26).
Jacob acaba de morir, y tal como lo prometieron sus hijos se disponen a viajar a Canaán para enterrarlo en la heredad de sepultura de Abraham, en la cueva de Macpela, propiedad que había sido adquirida de Efrón el heteo, y lugar donde Jacob había sepultado también a Lea (Gn 49:31). José pide permiso a Faraón para poder realizar el viaje, a lo cual el faraón reacciona de manera positiva y le da todo lo necesario para que vayan con seguridad. Luego de sepultar a Jacob regresan todos a Egipto (Gn 50:14). Y es aquí donde los hermanos de José se llenan de temor pues piensan que ahora que su padre ha muerto, José se vengara de todo lo que ellos le habían hecho. Sus hermanos le dicen que estando aún en vida Jacob les había indicado decirle que los perdone por todo el mal que le hicieron (Gn 50:17), ellos se postran y dicen estamos dispuestos a ser tus siervos, ante esto José llora.
Vemos que han pasado ya 17 años desde que han llegado a Egipto sus hermanos con su padre, sin embargo ellos aún dudan de la sinceridad del perdón de José, es difícil muchas veces aceptar el perdón, y casi siempre pensamos no puede ser tan fácil, como es posible que alguien pueda perdonarnos tal cosa, pero en este capitulo final vemos algunos principios que nos permitirán saber como José se libero del rencor, y del peligro de querer tomar la justicia en sus manos, vengándose de sus hermanos.
1. José sabe que solo Dios puede juzgar: Ante las palabras de sus hermanos, vemos que José les pregunta ¿Acaso estoy yo en lugar de Dios? (Gn 50:19), José les dice no teman, yo no soy quien para condenarlos, ustedes me hicieron mal, pero el que se encarga de juzgar es Dios, por mi parte estoy dispuesto a hacerles bien, porque son mis hermanos, son mi familia, José no ha olvidado lo que le han hecho, pero ello ya no despierta en el cólera ni resentimiento, la herida esta sanada, se puede ver la cicatriz, pero ya sano, y ahora para José queda como un recuerdo de la gracia de Dios en su vida.
2. José sabe que Dios fue quien lo llevó a Egipto: sus hermanos habían pensado hacerle mal pero Dios lo había encaminado a bien (Gn 50:20), José ha entendido que lo que le pasó no fue porque Dios no lo amara, al contrario Dios lo amaba, y había estado con él en todos sus angustias, lo había sostenido y protegido. José había aprendido a ver su vida no desde los ojos terrenales, no desde sus circunstancias sino desde la visión celestial, el sabía que su vida tenia propósitos eternos, y por ello había valido la pena todo.
Pablo hace mención:
"y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados" (Rom 8:28).
José sabe que todo lo que le ha pasado estaba dentro de los planes de Dios, a fin de preservar a su pueblo y la vida de muchas personas.
Entonces vemos aquí que nuestro conocimiento de quien es Dios es fundamental al momento de enfrentar nuestros conflictos familiares, el poder vernos no como victimas de las circunstancias queriendo nosotros ser los jueces, nunca nos traerá paz tal actitud, al contrario acabara destruyendo nuestras familias, la verdadera paz esta en el perdón y solo podemos perdonar de corazón cuando tenemos a Dios en nuestras vidas. Recordando las palabras del Señor Jesús:
"Así también mi Padre celestial hará con vosotros si no perdonáis de todo corazón cada uno a su hermano sus ofensas" (Mt 18:35).
No hay comentarios:
Publicar un comentario