LOS HIJOS DE AARÓN:
Los nombres de los hijos de Aarón fueron: Nadab (Primogénito), Abiú, Eleazar e Itamar (Num 3:2).
Estos fueron los 4 hijos de Aarón, primer sumo sacerdote, sus hijos fueron ungidos con el aceite de la unción tal como le había ordenado Dios a Moisés (Ex 30:30), y fueron vestidos con las vestiduras sagradas (Lev 8:13).
Dios fue quien los consagró, ellos no eligieron el sacerdocio, fueron elegidos por Dios, como lo fue su padre (Heb 5:4)
Nadab y Abiú, mueren por ofrecer fuego extraño delante de Jehová en desierto de Sinaí, ellos no tuvieron hijos (Núm 3:4).
LOS LEVITAS
Funciones:
Iban a estar bajo la autoridad de Aarón y de sus hijos (Núm 3:6 y 9)
Ministerio en el servicio del Tabernáculo (Núm 3:7 y 8)
Reemplazarían a todos los Primogénitos de los hijos de Israel (Num 3:12), delante de Dios, ellos serían para Dios (Num 3:12).
Dios había santificado para sí a todos los primogénitos de los hijos de Israel, tanto hombres como animales (Num 3:13, Ex 13:2).
Hijos de Leví por casa Paterna:
Los hijos de Leví fueron: Gerson, Coat y Merari (Num 3:17, Gn 46:11)
Los hijos de Gersón:
Nombres de sus hijos: Libni y Simei (3:18)
Varones de un mes arriba: 7500 (3:21-22)
Ubicación: A espaldas del tabernáculo, al Occidente (3:23)
Jefe del linaje de los gersonitas: Eliasaf (3:24)
Los hijos de Coat
Nombres de sus hijos: Amram, Izhar, Hebrón y Uziel (3:19)
Varones de un mes arriba: 8600 (3:28)
Ubicación: Al lado del tabernáculo, al Sur (3:29)
Jefe del linaje de los coatitas: Elizafan (3:30)
Los hijos de Merari
Nombres de sus hijos: Mahli y Musi (3:20)
Varones de un mes arriba: 6200 (3:34)
Ubicación: Al lado del tabernáculo, al Norte (3:35b)
Jefe del linaje de Merari: Zuriel (3:35a)
* Eleazar: Principal de los Jefes de los Levitas, Jefe de los que tienen la guarda del santuario (3:32)
Moises, Aarón y sus hijos
Ubicación: Delante del Tabernáculo, al Este (3:38)
Función: tenían la guardia del santuario
Advertencia: Ningún extraño podría acercarse, sino moriría.
TOTAL DE LEVITAS DE UN MES ARRIBA: 22.000 varones (3:39)
SEGUNDO CENSO DE LEVITAS MAYORES DE UN MES ARRIBA: 23.000 (Núm 26:62)
LOS PRIMOGÉNITOS DE ISRAEL
Dios ordena contar a todos los primogénitos varones de los hijos de ISrael, de un mes arriba (3:40)
Serían reemplazados por los Levitas (3:41a)
Los primogénitos de animales de Israel, serían reemplazados por los animales de los levitas (3:41b)
TOTAL DE LOS PRIMOGÉNITOS: 22. 273 (3:43)
Tanto los primogénitos varones de los hijos de Israel como los primogénitos de sus animales, le pertenecen a Jehova (3:45, Ex 13:2 y 12)
Precio de rescate de los 273 primogénitos: 5 ciclos (20 geras) por cabeza (3:46-47)
El dinero del rescate sería entregado a Aarón y a sus hijos (3:48)
Total entregado a Aarón y a sus hijos por el rescate: 1365 ciclos, conforme al ciclo del santuario (3:49-51)
CONCLUSIONES:
En el contexto de la Ley Mosaica, solo una de las tribus podía estar más cerca del Santuario, ahora todo hijo de Dios tiene entrada por la fe en el Señor Jesucristo, al trono de gracia donde puede hallar misericordia y alcanzar gracia para el oportuno socorro.
El extraño que se acercara al tabernáculo, moriría. Cristo murió para que ahora todo aquel que ponga su fe en Él, ya no sea un extraño, sino un hijo y pueda con confianza acercarse ante su Padre.
Dios fue quien escogió a Moises, a Aaron y sus hijos y a la Tribu de Leví, para que ocuparan funciones importantes delante de toda la nación. De la misma manera Dios ahora en su Iglesia, escoge y levanta a sus siervos, él ha dado dones a todos sus hijos, y él es quien pone a cada cual en un lugar de autoridad, para la bendición de toda la Iglesia.
Dios Ungió a Aaarón y sus hijos, para cumplir la función sacerdotal delante del pueblo, Dios ahora unge con el Espíritu Santo, a todo hijo suyo, y ahora todos somos sacerdotes llamados a presentar ofrendas espirituales al Señor (1 P 2:9).
Así como los primogénitos faltantes tuvieron que ser rescatados por un precio, todo hijo de Dios ha sido también rescatado y comprado por un precio, este precio fue la vida del Señor Jesucristo, este precio tan alto, hizo Dios para que seamos para siempre suyos (1Cor 6:20).
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